2017
Es un buen momento para ser sinceros con nosotros mismos y hablarnos sobre las cosas que sucedieron, las que hicimos que ocurrieran y también las que no, durante estos 361 días. Este año para mi casi no tuvo mucho significado en general, es verdad uno crece mediante el tiempo pasa y vamos sumando momentos, pero también nos damos cuenta cuando algo pudo ser de otra forma y no de la que fue, lástima que la realidad es solo lo que fue y que lo que pudo ser se nos queda tatuado para siempre. Admito que las experiencias fueron muchas, en todos los sentidos. Fue el año donde conocí la peor versión de mi, pero gracias a eso descubrí que la esperanza no es lo último que se pierde sino la dignidad y que hay mucha gente que va con el mejor disfraz de bueno, aunque debajo de todo ese maquillaje lo que hay es un hijo de puta. Me arrepiento de muchas cosas pero eso de andar cargando con ese peso, hace daño. El hubiera y yo no nos llevamos nada bien, por eso más vale tarde qu...